Coido que os encargados de organizar algúns certames están a perder a vergoña na comunicación, e quen soubese de Mercamelide pola prensa levou unha imaxe totalmente distorsionada do que aconteceu a pasada fin de semana en Melide.
O domingo, La Voz de Galicia publicaba o seguinte:
Mercamelide abarrota el Palacio de Congresos con sus saldos
Se consolida como referente para los comercios locales de textil y calzadoLas últimas gangas del verano ha sido lo que se llevaron a casa quienes ayer visitaron el Palacio de Congresos y Exposiciones de Melide con motivo de la feria de oportunidades del comercio local, que hoy tendrá continuidad en el recinto ferial de once de la mañana a ocho de la tarde.
Y es que acercarse a Mercamelide, como es conocido el mercado de saldos, y no comprar es prácticamente imposible. La variedad de artículos que, a precios más que irresistibles, se exponen para la venta en el gran escaparate que componen la treintena de establecimientos comerciales que participan en la cita, que se celebra en sexta convocatoria, es un reclamo infalible.
Tres prendas de vestir de primeras marcas al precio de una, moda joven desde 10 euros o zapatos de calidad certificada a 25 euros el par son solo algunas de las ofertas que el cliente puede encontrarse en la feria de oportunidades melidense, en la que los establecimientos de calzado y de textil forman la inmensa mayoría.
De hecho, los comercios que se animaron a participar por vez primera el mercado de saldos pertenecen a sendos subsectores, lo que pone de relieve que Mercamelide «está a funcionar sobre todo para os comercios que teñen artículos de temporada», afirma el edil de Promoción Económica del Concello melidense, Antonio Díaz, impulsor de la iniciativa entre los comerciantes locales.
Díaz realizó un balance positivo de la primera jornada de la feria de oportunidades, en la que, según indicó, la afluencia de gente fue superior durante la mañana. «A xente estaba agardando para empezar a mercar», indicó el edil, que confía en que, de acuerdo con la dinámica de anteriores ediciones, la concurrencia de clientela sea mayor durante la jornada de hoy al coincidir con día de feria ambulante en la localidad y, además, con el aliciente de la Feira do Libro no Camiño.
Pero a guinda ao pastel puxérona en El Correo Galego:
Melide estima en más de 90.000 € el volumen de negocio de su feria
La cita con los saldos se centró en el textil y el calzado con ofertas de hasta el 80%Un nuevo éxito, en esta ocasión ampliado incluso por la marea de visitantes en el municipio con motivo del Año Santo y su ubicación en pleno Camino Francés a Santiago. Así definían ayer los responsables municipales de Mercamelide el balance de la feria de saldos que tuvo lugar en la villa durante todo el fin de semana y en horario ininterrumpido.
Desde las once de la mañana de ayer, al igual que ocurría el sábado, el Pazo de Congresos melidense fue un auténtico trajín de clientes que buscaban la mejor ganga entre una treintena de puestos que en esta edición de la feria, la sexta, se centraban sobre todo en oferta de moda y calzados. Como es habitual en las ferias de oportunidades, los excedentes de la temporada de verano coparon muchos de los stands: shorts, camisetas, camisas, chaquetas de punto… a precios para todos los bolsillos. Las prendas de ropa más baratas se compraron por cuatro euros. En cuanto a los zapatos, las mejores ofertas se vieron en la oferta para señora, donde algunos pares llegaron a venderse por sólo 5 euros.
Además, los descuentos superaron en muchos casos el 50%, llegando a ofertarse prendas rebajadas incluso a un 80%. El reclamo promocional funcionó y desde la organización, el concejal de Promoción Económica, Antonio Díaz, aseguraba que “se estima que el volumen de negocio alcanzará e incluso superará algo al de otros años en los que sabemos que se llegó a los 90.000 euros en ventas”.
De hecho, algunos de los establecimientos “alcanzan en el fin de semana los 10.000 euros de ventas”, gracias a los 5.000 visitantes que se estima acudieron a Mercamelide entre el sábado y el domingo.
Los comercios trasladaban también su satisfacción con el adelanto de las fechas de esta feria de verano, que en otras ediciones tenía lugar después de las fiestas patronales del 15 “y el poder adquisitivo de muchas familias se veía reducido”. Sin embargo matizaron que, si se aprueba la Lei de comercio proyectada que sólo permitirá una feria de oportunidades al año por ayuntamiento, optarán por la de invierno (en febrero) porque es más fácil para los comerciantes trasladarse.
Se damos por certo o que publicaron na prensa, a feira de saldos foi un exitazo, pero a miña impresión foi todo o contrario. Pareceume que non había nin tendas nin público. Foi o peor Mercamelide celebrado nunca, e iso que comentan de que no futuro só poderá haber unha feira deste tipo ao ano non creo que sexa preciso que apareza nunha lei, senón que atende a unha realidade social: a pasada fin de semana Melide estaba a tope de xente, e os establecementos comerciais non teñen moito persoal, polo que desdobrarse para atender a súa tenda habitual e tamén módulo en Mercamelide é un esforzo excesivo nestas datas.
Apróbese ou non a Lei de Comercio, o Mercamelide do verán debería desaparecer, pois o do inverno chega de sobra (a última edición coido que tivo moi boa resposta).
A Feira do Libro no Camiño
Outro cantar é a Feira do Libro, que ao ser un evento cultural parece máis necesario, polo que non habería que medilo polo seu éxito comercial. Gusto da súa celebración, pero coido que habería que buscarlle unha mellor data, pois este ano coincidiu de pleno coa Feira do Libro de A Coruña, que teño entendido que é o evento deste tipo de máis éxito en Galicia (tanto na organización de actos como a nivel de vendas).
Para min o mellor deste encontro é que están a ter presenza as tendas especializadas en comics, polo que facilitan a achega á novena arte, aínda que dubido moito que aos responsables deses establecementos lles saia a conta pasar a fin de semana en Melide (especialmente en vésperas de Viñetas desde o Atlántico).
Vaia, que este ano as datas non cadraron moi ben, aínda que coido que ata dentro de 11 anos non teremos un calendario tan problemático.
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