Uff, por primera vez en esta bitácora voy a analizar un estreno cinematográfico. Y la verdad es que resulta difícil hacerlo en caliente por varios motivos, entre los que está el mero hecho de que llevo mucho tiempo esperando por la película (ya que soy un admirador del cómic) y la fidelidad a la obra original me produce todo un conflicto de criterios.
Para empezar, puedo confirmar que Natalie Portman está brillante y guapa, con lo que demuestra que hasta con el pelo rapado es una de las mujeres más hermosas de Hollywood, pero el papel que desempeña es quizás el menos fiel a la obra original, y es que lo modificaron en muchos valores esenciales para hacer la obra más moderna. V de Vendetta era un cómic ambientado a finales de los 90 en una Gran Bretaña oprimida tras una guerra nuclear, en la que el único medio de comunicación era radio y la depresión post-guerra se dejaba notar en todos los extremos. Así, Evey trabajaba en la fábrica de municiones y como el sueldo no le llegaba para sobrevivir tiene que hacer la calle, momento en el que se encuentra con unos dedos que pretenden violarla y matarla, o sea, que la situación parte de un momento mucho más complejo que en la película.
Quizás el fallo de la peli esté en intentar dar un carácter televisivo al asunto, puesto que la idea original de que el Gobierno utilizase a la voz del Destino a través de la radio para enviar sus mensajes resulta mucho más cautivadora (pero supongo que es poco visual, de ahí que decidieron cambiar todo de una forma radical).
Después de meditar un poco me di cuenta de un detalle: no es que cambiaran a todos los personajes de la historia, es que simplemente eliminaron un factor… ¡el sexo! Y es que no entiendo esa manía de eliminar la sexualidad de las películas para evitar la calificación de no recomendada para menores de 18 años, porque con esa coña están estropeando muchas historias. En el caso de V, ya eliminan que Evey iba a prostituirse para sacarse unas pelillas, quitan que la voz del Destino (en este caso, un presentador de televisión) era un homosexual reprimido que coleccionaba muñecas de porcelana como perversión y que se vuelve loco cuando V se las quema (mucho más cruel que matarlo sin más), y una de las cosas más depravadas que eliminan es que el líder se había enamorado de un ordenador (¡toma ya!). Digamos que, si no fuese porque toda esta carga sexual a los personajes les daba mucho carácter y hace que fuesen aún más detestables o patéticos (según el caso), las modificaciones serían poco significativas, pero al final resulta que la censura elimina elementos clave de la trama que habían resultado de gran interés para el público. Y es que la forma de asexuar a Evey es brutal, pues no sólo eliman su faceta de prostituta desesperada, sino que cuando se va a vivir con un hombre, en la película lo cambian por un gay para que no se acuesten juntos (algo que en el cómic sí sucede) y es que los gays en el cómic habían acabado todos en los medios de comunicación por ser sensibles (hacen algunas bromas al respecto en la obra original).
Pero, ¿cuál es el cambio más bestia? Uff, pues la verdad es que cambian el final… ¡sí, el final! Y es que si vemos el cómic como una historia cíclica tiene mucha lógica, de forma que al eliminar ciertos elementos de la película nos encontramos con que unos acontecimientos traumáticos y de vital importancia en la historia no tienen la misma reacción que en el cómic, por lo que carecen parcialmente de lógica, lo que puede enfadar a muchos. De todas formas no puedo dar detalles, porque estropearía el final de la película.
Eso sí, después de decir que la historia del cómic está mucho mejor, ¿cuál es mi valoración de la película? Parece mentira, pero mi valoración es que ¡está de puta madre! (lo mismito que pasaba con X-Men, que no se parecía mucho al cómic, pero al final mola igualmente) La estética está bien en cuanto a V, pero no me gusta ese aspecto tan moderno que tienen el resto de las cosas (pantallas de TFT y ordenadores por todas partes no pegan en la historia). Sobra decir que las pocas escenas de acción son brillantes, pero dudo mucho que a alguien le parezcan importantes en la historia.
Al final, narran una historia cautivadora (pese a que omitan detalles como la posibilidad de que la identidad de V corresponda al padre de Evey o a la desgraciada Valerie), rodeada de una interpretación bastante aceptable a la que le podemos achacar el hecho de que hayan reducido todo a la duración de una película (por lo que no pueden desarrollar a los personajes secundarios). Me parece que V de Vendetta es una fórmula excelente de entretenerse un par de horas en el cine, especialmente si ya se ha visto el éxito de la temporada (Ice Age 2).
Yo, por mi parte, esperaré a que salga en DVD para volver a ver a V celebrando el 5 de noviembre en honor a Guy Fawkes (personaje que dio lugar a que en inglés la palabra para definir a cualquier tío sea guy).
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